El 11 de julio pero de 1991 se registró el eclipse solar, que fue visible en 20 estados del país.
Quedó marcado en los recuerdos de al menos 20 Estados de la República Mexicana, donde fueron testigos privilegiados del fenómeno astronómico: El eclipse solar que cubrió una franja de oscuridad de 2 mil kilómetros de longitud por 250 de anchos.
En pleno mediodía , durante siete minutos, el día se convirtió en noche sobre la Ciudad de México, mientras que los estados del norte disfrutaron del espectáculo desde casi quince minutos antes y los del sur lo vivieron más de una hora después.
