RECORDANDO AL PERRO MÁS FIEL

El pasado 10 de noviembre se cumplieron 101 años desde que nació Hachiko de raza Akita, quien esperó 10 años en la estación de Shibuya.
Hachiko es recordado por su inquebrantable devoción hacia su dueño, el profesor Hidesaburō Ueno, a quien acompañaba todos los días hasta la estación de Shibuya. La rutina era simple pero entrañable: Ueno tomaba el tren para ir a su trabajo en la Universidad Imperial de Tokio, y cada tarde, al regresar, Hachikō lo esperaba para caminar juntos de vuelta a casa.
La rutina de Hachi se vería interrumpido tras el fallecimiento de su dueño el 21 de mayo de 1925, quien dando clases sufrió una hemorragia cerebral, dejando a su leal compañero esperando en vano.