Emiliano Zapata Salaza, conocido como “El Caudillo del Sur”, símbolo importante de la resistencia campesina en México, estuvo al mando del Ejercito Libertador del Sur. Sus principales ideales giraron alrededor de la justicia social, libertad, igualdad, democracia social, respeto a las comunidades indígenas, campesinas y obreras.
Emiliano Zapata se convirtió a la edad de 30 años, en dirigente agrario de Morelos. Empezó a analizar documentos que acreditaban los derechos de propiedad de los pueblos sobre sus tierras, los cuales habían sido negados por las Leyes de Reforma y participó en reuniones celebradas en Villa de Ayala, que después se convertirían en el "Plan de Ayala", que suponía una reforma agraria radical, “La tierra es de quien la trabaja”.
Zapata fue engañado el 10 de abril de 1919 por Jesús Guajardo, haciéndolo creer que estaba descontento con Carranza y que quería unirse a él, ofrecerle armamento y municiones para continuar con su lucha. Así, en la Hacienda de Chinameca, Morelos, al cruzar el dintel, tiradores escondidos en las azoteas, abrieron fuego contra Zapata y su escolta de cien hombres.